domingo, noviembre 13, 2005

Alejandra Pizarnik

VÉRTIGOS O CONTEMPLACIÓN DE ALGO QUE TERMINA Esta lila se deshoja, Desde sí misma cae y oculta su antigua sombra. He de morir de cosas así. LINTERNA SORDA Los ausentes soplan y la noche es densa. La noche tiene el color de los párpados del muerto. Toda la noche hago la noche. Toda la noche escribo. Palabra por palabra yo escribo la noche. Alejandra Pizarnik

viernes, noviembre 04, 2005

Don Ramiro

Con la mesa servida, cayó Don Ramiro de boca en el patio. En el estrecho espacio de tiempo que va entre plato y plato mordía inconsciente sus últimas bocanadas de aire. Y mientras la familia ya masticaba ravioles de seso con salsa bolognesa, y un jugo colorado resbalaba de los labios de Clarita, Don Ramiro estiraba la pata, como mandando el último centro al área, desviado y saque de arco. Las cosas, hermano, ya no son como eran antes. Y esa maldita costumbre de empezar a comer sin esperar al viejo. Roberto

Plaza Mayor

Me aleja y me acerca, da miedo, geométrica y simétrica, entradas-salidas. Junto valor y camino en diagonal. Confundo a las palomas, a los moros, algunos se dan cuenta de que algo no anda bien. Descubro miradas rojas, faldas levantadas, piernas anudadas sobre el piso. Arriba el cielo azul que no conozco, el que cubre y no protege. La sensación de otro mundo, otra ciudad, otros códigos. Paso y piso. Siglos de siglos. Soy el Gilgamesh sudaca, inmortal, Inka. Me asfixia tanta pared, tanta columna, tanto exceso de humedad acumulada. Madrid me descubre insolente, cruzando su plaza en diagonal, y creo que está bien molestarla. Roberto