miércoles, enero 05, 2005

Un poco de Alejandra Pizarnik

Dos poemas de Alejandra Pizarnik como para ir entrando en calor con esta poetisa que nos dejó toda su desesperación y todo su amor "La Tierra Más Ajena" (Bs As, Botella de Mar, 1955) LEJANÍA Mi ser henchido de barcos blancos. Mi ser reventando sentires. Toda yo bajo las reminiscencias de tus ojos. Quiero destruir la picazón de tus pestañas. Quiero rehuir la inquietud de tus labios. Porqué tu visión fantasmagórica redondea los cálices de estas horas? NOCHE correr no sé donde aquí o allá singulares recodos desnudos basta correr! trenzas sujetan mi anochecer de caspa y agua colonia rosa quemada fósforo de cera creación sincera en surco capilar la noche desanuda su bagaje de blancos y negros tirar detener su devenir

De lo mejor del 2004 en dibujo

En RO Galería de Arte se exhibe la muestra de Carlos Alonso y Guillermo Roux. Dos de los mejores artistas argentinos vivos de todos los tiempos. Sin duda no hay que perdérsela. Lamentablemente durante el mes de enero la galería permanece cerrada. Les sugiero que se inscriban en su página para recibir info de innauguraciones ya que esta galería tiena a Alonso en exclusiva. RO Galería de Arte está en Paraná 1158 Buenos Aires www.roart.com.ar Es un goce para los sentidos!!!!!

El Piquete

Me marcaba de costado como ofreciendo la línea. Bajaba la cabeza, acomodaba su negra porra negra y estiraba la blusita pop hasta el ombligo. El 184 amenazaba con entrar en provincia. El piquete nos cambió de recorrido. Saavedra había dejado de ser un puente, era un horno quemado con humo de gomas y olor a sobaco. Con pollos de gente y servilletas de tela pintadas al aerosol. Bajó su puerta por el cuerpo y miró hacia el fondo, escondiendo su infinito en anteojos de plástico. Corrimos juntos, cruzamos juntos, olimos juntos el hambre y la miseria. Y se perdió entre bocanadas negras y banderas argentinas. Yo imaginé todo, ella, creo, solo necesitaba comida.

La poesía que acompaña mis días

41/03 En el lenguaje te encuentro Piel y luz. Tu nombre me habla, Reflejo de vidrio esmerilado. Y es entonces cuando entro solo, despacio, Acaricio la voz de tu almohada Y dejo caer mi cabeza. Apago la luz, Beso la mano, Suspiro aire nuevo. Mañana te encontraré otra vez, Para saberte nueva.